EDUCACIÓN TÉCNICA: LA CLAVE DEL DESARROLLO EN LATINOAMÉRICA

Por Silvana de los Heros, representante de IDAT en RedTec-LATAM
 
La educación técnica en Latinoamérica es una de las variables en la ecuación del desarrollo que no ha sido aprovechada en la región. Según un estudio del Banco Mundial realizado antes de la pandemia, el promedio de estudiantes de este sector era de 9% en los países de América Latina y el Caribe, muy por debajo de otras regiones en el mundo con altos niveles de desarrollo como Asia Oriental y Pacífico (34%), América del Norte (30%), Europa (18%) y Asia Central (18%). 
 
Si bien es cierto que la educación técnica se ha convertido en una prioridad para muchos países de la región debido a su potencial para contribuir al desarrollo, existe una incongruencia en la práctica a nivel regional. Se  estima que, en América Latina y el Caribe,  el gasto público en educación superior representa el 1,7% del PBI, lo que es significativamente menor que el promedio mundial del 2,5%.

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Lo cierto es que, durante mucho tiempo, los profesionales técnicos han sido claves en los procesos de desarrollo. Las diferentes especialidades les permitieron aminorar la dependencia a la extracción de recursos para la construcción de valores agregados. Sin embargo, en la región existe una especie de estigmatización que recae sobre estos profesionales, que pese al haber desarrollado competencias específicas en la rama de su elección, cargan sobre sus hombros un sentir de inferioridad social frente a quienes culminaron una carrera universitaria. 
 
En general, los países latinoamericanos han cultivado en el imaginario social que un futuro respetable solo puede transitar por la universidad, causando una especie de divorcio entre dos variables que deberían complementarse y labrar un mismo camino hacia el desarrollo. En ese sentido, es importante virar hacia nuevos horizontes que permitan revalorizar la educación técnica en la región.  
 
La educación técnica apunta a ventajas diferenciales que permiten a sus profesionales insertarse rápidamente al mercado laboral con salarios competitivos, incluso mejores de quienes dejan inconclusa la educación universitaria. Asimismo, los egresados de carreras técnicas pueden continuar sus estudios de posgrado si desean desarrollar un perfil más académico.

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En este nuevo panorama, IDAT se ha convertido en una de las instituciones pioneras en la creación de RedTec-LATAM, la primera asociación latinoamericana de educación técnica, tecnológica y artística de la región. De esta manera, prestigiosas casas de estudios de más de cinco diversos países se han sumado a esta iniciativa que tiene como objetivo promover el acceso a educación técnica a través de alianzas interinstitucionales que permitan reducir las brechas de empleo en un mercado cada vez más competitivo.
 
Uno de los países clave en este proceso es Colombia, considerando que, según un informe del Banco Mundial, los dos países latinoamericanos con mayor proporción de estudiantes matriculados en carreras técnicas eran Colombia (31%) y Perú (25%). Las relaciones internacionales entre ambos países son de larga data como el creciente intercambio comercial, la participación en la Comunidad Andina y la Alianza del Pacífico, así como la revalorización de la educación técnica de la región a través de RedTec-LATAM.